- Hablamos con el Dr. Jorge Rioja, urólogo de Policlínica Sagasta de Zaragoza, centro médico gestionado por el grupo Cruz Blanca, y experto en la aplicación de la biopsia prostática robótica para el tratamiento del cáncer de próstata a través de la terapia focal mediante ablación térmica con láser.
- La biopsia prostática por fusión mediante el Robot Artemis permite detectar con precisión el tumor para extirpar posteriormente con la técnica del láser.
- Los centros médicos Cruz Blanca son pioneros en España en la aplicación de la terapia focal mediante ablación térmica con láser, una técnica mínimamente invasiva sin efectos secundarios para tratar el cáncer de próstata.
La tasa de supervivencia de pacientes con cáncer de próstata ha mejorado en las últimas décadas gracias al diagnóstico precoz y, en particular, a los avances en los tratamientos destinados a su curación.
En España, el 85% de pacientes con cáncer de próstata sobreviven más de 5 años, una tendencia que se estima que continúe al alza (1).
La fusión de las imágenes de la resonancia magnética (RMN), de la ecografía y la biopsia por fusión mediante el Robot Artemis permiten la detección de tumores prostáticos de manera muy precisa. Esta situación ha dado lugar a la aparición de nuevos abordajes terapéuticos para el cáncer de próstata, entre los cuales destaca la terapia focal.
En la actualidad, existen cuatro tipos de terapias focales en función de la fuente de energía empleada para extinguir el tumor. En la crioterapia se aplica frío, en la técnica HIFU se emplean ultrasonidos de alta frecuencia, en la braquiterapia focal se recurre a la radioterapia y en el láser fotodinámico o Electroporación Irreversible (EI) se aplica electricidad.
Cruz Blanca es el primer grupo médico en aplicar la terapia focal mediante ablación térmica con láser. Se trata de un tratamiento mínimamente invasivo que permite llegar a la zona específica de la lesión, delimitando con exactitud los márgenes del tumor sin afectar a otras áreas colindantes de la próstata. Además, permite que el paciente quede libre de los efectos secundarios producidos por abordajes terapéuticos convencionales como la extirpación de la próstata o Prostatectomía.
El Dr. Jorge Rioja explica en esta entrevista en qué consiste la terapia focal mediante ablación térmica con láser y qué ventajas presenta esta técnica para el tratamiento del cáncer de próstata.
¿Qué proceso lleváis a cabo desde que un paciente llega a la consulta hasta la aplicación de la terapia focal?
Existen dos tipos de situaciones. Por un lado, puede darse el caso de que el paciente acuda a la consulta para realizarse una revisión urológica, lo que nos permite obtener un diagnóstico. Por otro lado, puede ocurrir que el paciente asista a la consulta ya diagnosticado.
Para conocer el estado de la próstata, ¿qué pasos concretos seguís?
En primer lugar, para proceder al diagnóstico, realizamos al paciente una exploración y le solicitamos que realice dos pruebas, en concreto, una Prueba de PSA (antígeno prostático específico) y una ecografía. Si los resultados del PSA son sospechosos, solicitamos al paciente que realice una resonancia magnética (RM) y, además, valoramos la necesidad de llevar a cabo una biopsia.
¿Cuándo es necesario biopsiar?
Realizamos la biopsia prostática por fusión cuando la resonancia magnética (RM) es positiva, es decir, cuando nos indica que el PI-RADS o nivel de gravedad de la lesión es igual o superior a 3.
El PI-RADS, en español denominado Sistema de Información y Reporte de la Imágenes de Próstata, es el sistema que permite al médico ver qué probabilidad tiene un área sospechosa de ser cancerígena. El PI-RADS establece del 1 al 5 el nivel de gravedad de la lesión, que se clasifica en:
- PI-RADS 1: Muy baja probabilidad de que se trate de un cáncer.
- PI-RADS 2: Baja probabilidad.
- PI-RADS 3: Probabilidad intermedia (indefinido y confuso).
- PI-RADS 4: Alta probabilidad.
- PI-RADS 5: Muy elevada probabilidad.
¿Qué técnica empleáis para realizar la biopsia?
En Cruz Blanca, aplicamos la biopsia prostática robótica por fusión mediante el Robot Artemis, el mejor y único equipo del mercado que permite localizar con mayor precisión las lesiones de la próstata. Esta técnica es mínimamente invasiva y nos facilita una visión más exacta del estado de este órgano.
¿Podríamos decir que la biopsia mediante el Robot Artemis es esencial?
Sí, es imprescindible en cualquier caso. Incluso cuando el paciente acude a la consulta con un diagnóstico previo también debe someterse a la biopsia prostática por fusión con el equipo Artemis, aparte de revisar las pruebas descritas anteriormente.
Actualmente, empleáis el uso de la robótica sumado al uso de láser convirtiéndoos en pioneros de esta terapia focal. ¿Por qué esta elección?
La biopsia robótica nos permite localizar con mucha precisión el tumor y, posteriormente, aplicar la terapia focal correspondiente. La técnica del láser nos permite delimitar los márgenes exactos del tumor, dañando lo más mínimo posible otras áreas colindantes de la próstata.
El Robot Artemis consigue guiar a la fibra óptica mediante punción transperineal para realizar una terapia lo más focal posible y, de esta manera, con menores efectos secundarios.
¿En qué casos se utiliza la vigilancia activa en lugar de la terapia focal por láser intersticial?
La vigilancia activa es una alternativa para pacientes con tumores de bajo riesgo y leve carga tumoral. La terapia focal, por su parte, es un tratamiento con intención curativa para este tipo pacientes con tumores leves, sin embargo, también es un método indicado para personas con tumores más agresivos y de mayor volumen tumoral.
¿Cuántas sesiones son necesarias para finalizar la terapia?
El tratamiento se realiza en una única sesión de 30 minutos, de manera ambulatoria, sin sondajes y con muy poca convalecencia, así como mínimas secuelas.
¿Qué resultados habéis obtenido hasta el momento mediante esta técnica?
Con la terapia focal, en cualquiera de sus modalidades, hemos logrado buenos resultados.
Con la terapia focal mediante ablación térmica con láser, en concreto, hemos tratado a más de una veintena de pacientes, de los cuales solo uno de ellos ha tenido que ser rescatado cinco años después con un tratamiento quirúrgico, denominado Prostatectomía Radical. Esto le permitió seguir con su vida plenamente activa y sin secuelas. Pero, en general, todos los casos evolucionan de forma satisfactoria.
¿Encontramos alguna mejoría en cuanto a la recuperación del paciente respecto a las terapias convencionales?
Los pilares de la terapia focal con láser son precisamente una mínima convalecencia, unos mínimos efectos secundarios y la ausencia de sondaje. La intervención se hace de manera ambulatoria, aunque siempre debemos respetar un tiempo prudencial para una óptima recuperación.
A diferencia de los tratamientos de radioterapia o quirúrgicos, la terapia focal reduce el riesgo de sufrir efectos secundarios, tales como incontinencia urinaria e impotencia.
¿Crees que ha sido un gran paso para la ciencia?
Más que un gran paso para la ciencia, es un pasito muy pequeño en el tratamiento de los pacientes con cáncer de próstata, pero no por ello menos importante.
¡Muchas gracias Dr. Jorge Rioja!
Referencias
(1) Asociación Española Contra el Cáncer https://www.aecc.es/es/todo-sobre-cancer/tipos-cancer/cancer-prostata/pronostico