Las dietas sin gluten son más comunes que nunca. Para algunos se trata de una elección de estilo de vida, pero para muchos otros es una necesidad médica.
El gluten es una glucoproteína que se encuentra naturalmente en cereales de consumo habitual como el trigo, la cebada, el centeno o la avena. Ofrece una variedad de beneficios culinarios y es responsable de la textura suave y elástica de muchos alimentos a base de cereales, principalmente productos de panadería. Sin embargo, la ingesta de este componente resulta un tanto indigesta para el cuerpo humano. En algunas personas, la indigestión del gluten puede producir problemas autoinmunitarios, alérgicos o de sensibilidad. Estas tres reacciones tienen orígenes y síntomas distintos, por lo que resulta crucial diferenciarlas para abordarlas adecuadamente.
El Dr. Rondón Cepeda y el Dr. Ferrández Arenas, alergólogo y digestólogo de Paracelso Sagasta respectivamente, exponen las diferencias entre las tres afecciones relacionadas con el gluten y el trigo más comunes: la enfermedad celíaca, la intolerancia al gluten y la alergia al trigo.
Enfermedad celíaca
La celiaquía es una enfermedad autoinmunitaria caracterizada por una intolerancia permanente y crónica al gluten. Afecta la mucosa del intestino delgado, lo que provoca una malabsorción de nutrientes y los consiguientes problemas de salud asociados. Aunque se trate de una de las patologías crónicas intestinales más frecuentes, sigue existiendo un alto porcentaje de pacientes sin diagnosticar.
La persona afectada notará los síntomas intestinales y extraintestinales durante los días o semanas posteriores a la ingesta de gluten, independientemente de la cantidad ingerida. Algunos de los más comunes son la pérdida de apetito, vómitos, diarreas, dolor abdominal, hinchazón, pérdida de peso, fatiga y problemas de desarrollo o crecimiento.
Intolerancia al gluten
La intolerancia al gluten no celíaca (también dicha sensibilidad al gluten) se presenta en individuos genéticamente predispuestos y se caracteriza por la incapacidad a nivel intestinal de asimilar correctamente el gluten. Contrariamente a la enfermedad celíaca, en este caso no interviene el sistema inmunitario.
Los efectos de la intolerancia varían según la cantidad de gluten ingerido y aparecen al cabo de horas o días. La sintomatología incluye dolor abdominal, cefaleas, diarrea, gases, abdomen hinchado y hormigueo en extremidades.
Alergia al trigo
Se trata de una reacción inmunológica frente al trigo ingerido o inhalado que puede llegar a ser grave. Se caracteriza por la presencia de anticuerpos contra los alérgenos (proteínas) contenidos en el trigo.
A diferencia de la celiaquía y la intolerancia al gluten, la reacción de una alergia al trigo es de inicio brusco y puede ser provocada hasta por pequeñas cantidades de trigo. La persona afectada presentará síntomas cutáneos, respiratorios, gastrointestinales o (en casos graves) circulatorios, a los pocos minutos de entrar en contacto con la sustancia. Los síntomas más habituales son: picor y ronchas (urticaria), dificultad para respirar, dolor abdominal, vómitos, diarrea, mareo, bajada de tensión y pérdida de conciencia (shock anafiláctico).
Diagnóstico
Tanto la enfermedad celíaca como la intolerancia al gluten y la alergia al trigo pueden detectarse con pruebas diagnósticas parecidas.
Los análisis de sangre son el tipo de prueba más recurrente para el diagnóstico de afecciones relacionadas con el gluten. En caso de dar positivo, también pueden realizarse otras pruebas complementarias para un diagnóstico más preciso. Como por ejemplo, pruebas endoscópicas, cutáneas (prick test), funcionales pulmonares u otras analíticas sanguíneas para cuantificar anticuerpos específicos. Resulta primordial no seguir una dieta sin gluten sin antes consultar con un especialista, ya que los resultados de las pruebas podrían distorsionarse y obtener falsos negativos.
En cualquier caso, si crees padecer alguna afección relacionada con el gluten o el trigo, consulta a un profesional médico. Desde Paracelso Sagasta disponemos de un amplio catálogo de pruebas diagnósticas para la detección de todo tipo de alergias y patologías digestivas. Nuestras Unidades de Digestología y Alergología cuentan con un equipo profesional altamente especializado que, junto a tecnología de última generación, te ofrecerá una atención médica integral y personalizada. Pide cita con uno de nuestros expertos.