Las hemorroides, popularmente conocidas como almorranas, son una patología benigna más común de lo que creemos. Se producen por la dilatación e inflamación de las venas de la zona recto-anal y se manifiestan en forma de escozor, picor, sangrado y, en algunas ocasiones, prolapso hemorroidal, caracterizado por una incomoda sensación de «bulto».
A continuación, te ofrecemos una serie de recomendaciones para prevenir su aparición y aliviar las molestias asociadas:
- Evita el estreñimiento. Consumir alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras, cereales integrales y semillas, contribuye a regular el tránsito intestinal. Mantener una dieta adecuada es clave para prevenir esfuerzos excesivos al defecar, uno de los principales factores desencadenantes de las hemorroides.
- No te esfuerces al defecar. Hacer demasiada fuerza, además de resultar doloroso, puede agravar los síntomas debido al aumento de la presión intra-abdominal. Evita hábitos como usar el móvil durante la evacuación, ya que esto puede prolongar innecesariamente el proceso.
- Hidrátate. El consumo abundante de líquidos facilita el tránsito intestinal y disminuye la necesidad de realizar esfuerzos durante la evacuación. Intenta beber alrededor de 2 litros de agua al día.
- Elimina alimentos irritantes. El alcohol, el café y los aderezos picantes, como por ejemplo las guindillas, irritan en mayor medida el intestino grueso, empeorando los síntomas de las hemorroides.
- Muévete. El ejercicio físico moderado, como caminar, puede aliviar los síntomas. Sin embargo, evita estar de pie durante periodos prolongados, ya que esto aumenta la presión sobre las hemorroides y favorece su inflamación.
- Realiza baños de asiento. Si sientes picor, escozor o dolor, los baños de asiento con agua templada pueden ser de gran ayuda. Repite este procedimiento dos o tres veces al día durante 15 minutos. También puedes añadir hierbas medicinales con propiedades antiinflamatorias para potenciar sus efectos.
- Evita la ropa ajustada. Sobre todo en lo que se requiere a la ropa interior. El uso de tanga, por ejemplo, perjudica el riego sanguíneo, lo que puede incrementar las molestias y dificulta la desaparición de las hemorroides. Opta por tejidos suaves y transpirables.
- Cuida tu higiene íntima. Mantén la zona limpia sin rascarte y ni frotar con intensidad, ya que ello sólo hará que incrementar las molestias y provocar más irritación. Utiliza agua tibia y jabón neutro para asear la zona de forma suave y a base de toques después de ir al baño. Puedes consultar con tu médico el uso de una pomada o crema especial.
En Paracelso Sagasta, entendemos que las hemorroides pueden resultar muy incómodas, pero con hábitos saludables y cuidados adecuados es posible prevenir su aparición y aliviar los síntomas. Siguiendo estas recomendaciones, podrás minimizar las molestias y mejorar tu calidad de vida. Recuerda que pequeños cambios en tu rutina pueden marcar una gran diferencia en tu bienestar.